La diabetes tipo 1 (DT1) es una enfermedad crónica que requiere atención médica continua y autogestión por parte del paciente para prevenir complicaciones a largo plazo.

La diabetes tipo 1 (DT1) es una enfermedad crónica que requiere atención médica continua y autogestión por parte del paciente para prevenir complicaciones a largo plazo.
La investigación en diabetes avanza inexorablemente ayudándonos a mejorar la salud y la calidad de vida de las personas con viven con ella.
La enfermedad que conocemos como diabetes mellitus en realidad agrupa a un conjunto de enfermedades distintas, que son más difíciles de diferenciar que lo que aparenta su clasificación.
El tratamiento de la diabetes (entendiendo esta patología en todo su vasto concepto, con sus diferentes tipos y circunstancias) habitualmente supone todo un reto para las personas que la padecen, y también para el sistema y los profesionales sanitarios.
La palabra adolescencia deriva del latín «adolesco-adolescere» significa adolecer, es decir «crecer a pesar de todo, con dificultades».
Definición de adherencia terapéutica y formas de medición: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la adherencia terapéutica se define como la medida en la que el paciente cumple con las normas pautadas por el profesional sanitario, incluyendo tanto el tratamiento farmacológico prescrito como los cambios de estilo de vida recomendados.
Los tratamientos con sistemas de asa cerrada utilizados en diabetes tipo 1 son tecnologías avanzadas que automatizan la administración de insulina para ayudar a controlar los niveles de glucosa.
Los programas de diagnóstico precoz de la diabetes tipo 1, dirigidos a identificar personas en riesgo y aquellas en etapas presintomáticos de la diabetes tipo 1, se están expandiendo a nivel global en los últimos años.
La restricción de carbohidratos ha ganado cada vez más popularidad como terapia nutricional complementaria para el manejo de la diabetes.
La diabetes tipo 1 es una enfermedad compleja en la que la predisposición genética desempeña un papel importante y cuyo desarrollo comienza antes de que se manifiesten síntomas o se realice el diagnóstico clínico.