La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es una de las enfermedades con mayor impacto sociosanitario a nivel mundial, no sólo por su alta prevalencia, sino también por las complicaciones crónicas que produce y por su elevada tasa de mortalidad.

La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es una de las enfermedades con mayor impacto sociosanitario a nivel mundial, no sólo por su alta prevalencia, sino también por las complicaciones crónicas que produce y por su elevada tasa de mortalidad.
La planificación del entrenamiento físico-terapéutico es el proceso más complejo dentro de la preparación física de un paciente.
Cuando nos acercamos a conocer el mundo de la salud de las mujeres, y específicamente de la etapa que rodea la menopausia, nos encontramos con un mosaico de mitos, tabúes, mezclas de conceptos y aspectos vinculados a la patologización, medicalización e invisibilización de esta fase de la vida.
La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es una enfermedad epidémica que afecta al 12% de la población de mediana edad, y cuya incidencia continúa aumentando de manera rápida impulsada por un entorno claramente obesogénico.
La clasificación diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2 es artificial y los límites entre ambas entidades son difusos en numerosas ocasiones.
La enfermedad cardiovascular (ECV) sigue siendo la principal causa de morbilidad y mortalidad en la Unión Europea (UE).
La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es una de las afecciones de mayor prevalencia en la actualidad y una de las principales causas de morbilidad y mortalidad prematuras en todo el mundo.
Aunque la depresión no sea una de las complicaciones que se asocian tradicionalmente con la diabetes, realmente existe un aumento significativo de esta enfermedad psiquiátrica en comparación con la población general.
La diabetes mellitus (DM) comprende un conjunto heterogéneo de entidades clínicas con el denominador común de niveles crónicamente elevados de glucosa en sangre.
La insuficiencia cardiaca (IC) es una anomalía cardiaca estructural o funcional que produce una reducción del gasto cardiaco o una elevación de las presiones intracardiacas en reposo o estrés.